Scientific Big Data
ISSN 2604-6083
Original article / Biology and Life Sciences

Mechanical, chemical and biological filtration

Filtración mecánica, química y biológica

Authors: Ramón Cárceles-Guerrero

Keywords: Mechanical filtration. Biological filtration. Chemical filtration. Aquariums. Filters

Keywords : Filtración mecánica. Filtración biológica. Filtración química. Acuarios. Filtros

Abstract: Filtration is the part of aquarism in which more ingenuity has been wasted. Accustomed to be the favorite part of the "hands" DIY enthusiasts and no wonder, over time and since its inception the mechanisms to make the water move, surprise any curious person.

Abstract : La filtración es la parte del acuarismo en la que se ha derrochado más ingenio. Acostumbra a ser la parte favorita de los “manitas” aficionados al bricolaje y no es para menos, a lo largo del tiempo y ya desde sus orígenes los mecanismos para hacer mover el agua sorprenden a cualquier persona curiosa.


Citation: Ramón Cárceles-Guerrero. Filtración mecánica, química y biológica. https://:doi.org/10.24175/sbd.2017.000001
Received: May 09, 2017  Accepted: May 09, 2017  Published: May 09, 2017
Copyright: © 2017 Ramón Cárceles-Guerrero. This is an open access article distributed under the terms of the Creative Commons Attribution License (CC BY-NC), which allows, distribution, reproduction in any medium, provided the original author and source are credited and non-commercial use.
Funding: I certify that no funding has been received for the conduct of this study and/or preparation of this manuscript.
Conflicts of Interest: I have no conflicts of interest to declare

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Figures



LOS TRES TIPOS FUNDAMENTALES DE FILTRACION:

FILTRACIÓN MECÁNICA

Filtro mecánico

© Zootecnia doméstica. Der. Res.

Es la filtración básica en la que todos inicialmente pensamos. Consiste en retener físicamente todas las partículas, grandes y pequeñas, que se encuentran en suspensión en el agua.

Es la primera etapa de todo filtro porque, además, nos protege las siguientes materias de un taponamiento prematuro. Existen multitud de materias útiles para ello y aconsejo utilizar varias de diferente espesor. En primer orden el agua debe pasar por la de mayor porosidad para capturar las partículas más gruesas (Trozos de hojas, excrementos, restos de comida,etc…).

Posteriormente acabaremos de retener las partículas más finas con un material de poro reducido. Una combinación muy utilizada es el foamex grueso como primera fase y la lana de perlón, más densa, como segunda que retendrá las partículas de polvo (Ver imagen). La gran mayoría de materiales de filtración mecánica son reutilizables y por tanto económicos. Basta con lavarlos con agua corriente o, mucho mejor, aclararlos con agua extraída previamente del acuario para que conserven parte de la flora bacteriana.

Nunca se deben cambiar o lavar con agua del grifo todos los materiales a la vez!. Por molesto que resulte, se deben alternar siempre los cambios salvo que el mismo acuario disponga de filtro biológico independiente. Lo que sí podemos hacer es aclararlas con agua previamente sacada del acuario. La textura de las gomaespumas incluido el foamex se pierde con el tiempo y deben ser repuestas.

FILTRACIÓN BIOLÓGICA

Filtro biológico

© Zootecnia doméstica. Der. Res.

La filtración biológica es la segunda fase o etapa de filtrado del agua. Se fundamenta en la actividad bacteriana descrita en el apartado ciclo del nitrógeno y su descubrimiento supuso una revolución en el ramo que aportó una calidad del agua hasta entonces sólo igualada por los frecuentísimos cambios.

Actualmente parecen estar en desuso los filtros de gravas, biológicos o de fondo. Una verdadera lástima. Quizás ello se deba a la aparición de nuevos materiales de soporte para la flora bacteriana muy eficaces y que pueden ser intercalados en cualquier filtro añadiendo comodidad de mantenimiento y libertad para escoger el sustrato del fondo del acuario.

La mayoría de materiales son de orígen cerámico aunque la última generación de filtros de agua salada, llamados "seco-húmedo" o "de lecho fluido" han aportado muchas y sorprendentes novedades. Aquí debo extenderme un poco.

Cuando montamos un filtro biológico sus materiales están limpios y no presentan actividad bacteriana alguna. Inoculemos o no las primeras bacterias, deberemos esperar poco a poco su maduración. Introduciremos el primer pez y esperaremos a que proliferen. Progresivamente añadiremos los demás inquilinos. Si utilizamos un cultivo de bacterias (Muy recomendable) aceleraremos el proceso.

Los norteamericanos expertos no introducen peces sino que alimentan las bacterias con cloruro de amonio o sulfato de amonio y evitan riesgos. Nunca he utilizado este método, he preferido hacer uso de la paciencia. Si queremos controlar en todo momento el estado de maduración del acuario (Aconsejable en los caros montajes marinos) nos haremos con un kit de medición de amoníaco (NH3), nitritos (NO2) y nitratos (NO3). En las primeras muestras aparecerá el amoníaco y ni rastro de los otros dos. Gradualmente el nivel de amoníaco descenderá y paulatinamente aumentará el nitrito (Unos diez o quince días aprox.) señal inequívoca del establecimiento de las nitrosomonas. Posteriormente descenderá el nitrito y aumentará el nitrato equiparándose ambos hasta desaparecer el primero con lo que el filtro estará maduro y tendremos una población estable de nitrosomonas y nitrobacter.

FILTRACIÓN QUÍMICA

Filtro químico

© Zootecnia doméstica. Der. Res.

La filtración química es la encargada de retirar los elementos y compuestos no deseados que se encuentran disueltos en el agua así como añadir otros que pueden ser necesarios para acondicionarla.

Más un tratamiento que una filtración propiamente dicha, se ha vuelto parte indispensable del filtro de cualquier acuario. El material protagonista de esta etapa sin duda es el carbón activado pero en los últimos años las nuevas tecnologías han aportado las resinas de intercambio iónico de diferentes aplicaciones. Otro material usado desde hace mucho tiempo son las turbas acidificantes.

Una combinación típica es el uso de carbón y turba. Causa polémica entre acuaristas por el hecho de que el carbón, como veremos, es un adsorbente químico que podría asimilar parte de los principios activos cedidos al agua por las turbas acidificantes. Personalmente, prefiero tratar el agua con turbas mediante un pequeño filtro interior independiente que pueda retirar cuando haya realizado su función sin causar trastornos. En ambos casos, nunca me encontré con la dichosa contraindicación.

Salvo algunas resinas, estos materiales no son reciclables y prácticas como someter a altas temperaturas el carbón para reactivarlo no son más que leyendas. La manipulación de estos materiales puede resultar compleja por el diminuto tamaño de sus partículas. Siempre hemos utilizado medias o "pantys" femeninos con gran éxito y no ceden substancias perjudiciales al agua. Buenas noticias para los varones. Existen unos calcetines del mismo tejido llamados "de ejecutivo". Ya no es necesario enfundarse una gabardina y esconderse tras unas gafas de sol para entrar a una mercería a comprar "pantys" (Es broooma).

Por qué debe ir en último lugar el material químico? Este es un tema recurrente y existen diversidad de opiniones al respecto. Personalmente siempre he preferido dejar en último lugar la filtración química para proveer una mayor oxigenación a la zona biológica así como prever un posible shock químico en la flora bacteriana al introducir un material tamponador muy activo, simplemente (Esto último raramente ocurre pero puedo confirmar que fue mi caso en alguna ocasión).

Materiales filtrantes mecánicos, biológicos y químicos

© Zootecnia doméstica. Der. Res.

Típica combinación de materias filtrantes apta para la mayoría de acuarios de especies resistentes. Empezando por arriba, en azul el foamex y en blanco la lana de perlón ambos realizan la función de filtro mecánico.

Seguidamente, canutillos de porcelana que sirven de soporte a la flora bacteriana y por tanto parte biológica del filtro.

 Y por último, en negro el carbón activo y en marrón la turba, sólo necesaria en especies delicadas amazónicas y de las pluviselvas asiáticas. Esta es la parte química del filtro que personalmente prefiero dejar en último término, tras la biológica.

NOTAS: Causa una eterna polémica el uso simultáneo de carbón activo y turbas acidificantes. El carbón activo asimilará gran parte de las sustancias beneficiosas que libera la turba y sin embargo esta seguirá acidificando el agua (Esa es mi experiencia personal). Que cada uno decida…

Otro tema eterno de discusión es si debemos intercalar la filtración química entre la mecánica y biológica o dejarla para el final. Si optamos por lo segundo, el agua llegará a la zona biológica más oxigenada y las bacterias no correrán el posible riesgo de un shock químico ante un reciente cambio de materia filtrante "tampón".

A TENER EN CUENTA:

LA POBLACIÓN DE BACTERIAS ES PROPORCIONAL A LA PRODUCCIÓN DE DESECHOS. Añadir muchos peces a la vez en un acuario maduro puede producir más desechos de los que puedan asumir las bacterias. Retirar temporalmente la mitad de los peces reducirá la población bacteriana. En ese caso puede ser útil alimentar en exceso aunque peligroso.

DETENER EL FILTRO MAS DE DOS HORAS PUEDE REDUCIR CONSIDERABLEMENTE LA POBLACIÓN BACTERIANA. Las bacterias son aerobias y la falta de oxígeno las mata. Tras un corte de suministro eléctrico hay que oxigenar enérgicamente el agua para después (y sólo después) añadir concentrado o cultivo de bacterias. Se aconseja detener el filtro para alimentar a los peces. Cuidado con los olvidos.

NUNCA LAVAR LA TOTALIDAD DE LOS MATERIALES DEL FILTRO BIOLÓGICO (A menos que lo hagamos suavemente con agua retirada del mismo acuario). Si se dispone de más de un acuario y se está totalmente seguro de que está libre de enfermedades se puede introducir material maduro en el nuevo para "sembrar" la flora bacteriana (Peligroso).